Todos convenimos en que los recursos humanos son los más valiosos de cualquier organización a la hora de potenciar su competitividad. Por tanto, la detección, desarrollo y retención del talento resulta de vital importancia para el crecimiento económico sostenido. Apostar pues por el joven talento es apostar por el futuro de nuestras empresas y nuestra economía.
A pesar de ello, somos conscientes de que en épocas de recesión, la gestión de los recursos humanos se ve muchas veces dominada por la rentabilidad. Pensar en el largo plazo es difícil en tiempos en los que cualquier ahorro de costes puede suponer incluso la supervivencia de una empresa, pero si somos capaces de observar la fotografía con perspectiva, veremos que la gestión y retención del talento se convierte en una necesidad para el futuro de nuestra empresa. Y acercando un poco el zoom a esa fotografía, descubriremos que una efectiva gestión de los recursos humanos será capaz de ofrecernos interesantes ventajas también en el corto plazo.
Una efectiva gestión de los recursos humanos será capaz de ofrecernos interesantes ventajas también en el corto plazo
Bien sea a través del departamento de recursos humanos de nuestra corporación o de profesionales en asesoría de recursos humanos externos y centros formativos homologados, resulta clave detectar el talento, explotarlo al máximo y ser capaces de retenerlo en beneficio de la empresa.
El Gobierno ha sentado las bases para potenciar y perfeccionar la gestión del talento mediante una formación de calidad dentro de las propias empresas, a través de numerosos planes y programas, como el Sistema de Garantía Juvenil o el nuevo modelo de formación para el empleo, basado en los Contratos de Formación y los Certificados de Profesionalidad.
La formación resulta pues una de las grandes herramientas para mejorar la productividad de las empresas. Y se hace básico conocer cada una de las fórmulas y su correcta aplicación para lograr que el talento sea productivo y fiel.
Costes cero en las cuotas de la Seguridad Social, reducciones y subvenciones son algunos de los beneficios asociados a la formación, que complementan el ya de por sí atractivo de poder formar integralmente al joven trabajador bajo la filosofía de nuestra compañía, con la formación específica para un puesto de trabajo en concreto y otorgándole una cualificación profesional que se reflejará en una mejora de los procedimientos, productos y servicios de la empresa.
La gestión del joven talento ha de pasar por la generalización de los contratos de formación y el diseño de un plan de formación estructurado
La gestión de esa formación de calidad ha de pasar por la generalización de los contratos de formación como práctica eficaz para incorporar nuevos talentos y por el diseño de un plan de formación estructurado en la empresa que permita el desarrollo de ese talento.
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